COREOHACKEAR TWITTER
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En el confinamiento vivimos de otra manera la idea espacial y he sentipensado mucho en torno a nuestra relación con las redes sociales y cómo habitamos este espacio virtual. Hay una discusión sobre la saturación de información, la violencia del medio, etc., el eterno scrolleo, pero me di cuenta, que no había observado las redes desde su percepción espacial y twitter tiene una configuración de origen de sobrepoblación, donde el espacio se atiborra y ahoga.
Twitter sería en un mundo material una de tantas grandes urbes, donde debido a la especulación inmobiliaria, nos obliga a vivir en departamentos reducidos de 120 caracteres, sin poder divisar horizontes.
Pensé que era urgente crear otros ritmos, amplitudes y vacíos en el TL, hackear ese espacio y crear respiros en esa saturación. Necesitábamos espacio por doquier, abrirlo, salir del encierro y empecé a crear coreografías en twitter, otras temporalidades en el TL, otras relaciones con las grafías, otros diálogos desde la abstracción, pensando en el poder político -incluso restaurativo- de ese espacio que crea respiros.
Batallo con el formato y las grafías, evidentemente. Supongo que a botepronto la gente piensa que estoy haciendo dibujitos sin sentido, para entretener, es inevitable cuando la saturación es lo que pondera. Yo mientras tanto pienso en cómo la coreografía está en todas partes, en su potencia, en su capacidad de intervención.
Sé que en la vorágine del scroll estos coreotweets provocan extrañeza, un parpadeo que evoca un horizonte, un espacio interior. Mi propio respiro. 
English
In confinement we have been living the idea of space in a different way and I have thought a lot about our relationship in social networks, how do we inhabit the virtual space. There is a discussion about the saturation of information, the violence of the environment, the eternal scrolling, etc.; but I realized that I hadn’t observed the networks from their spatial perception and twitter has its original configuration, as one of overpopulation, where space is crowded and suffocates.
In a material world, Twitter would be one of the big cities, where due to real estate speculation, it forces us to live in small little apartments, spaces of 120 characters, without being able to see horizons.
I thought it was urgent to create other rhythms, amplitudes and gaps in the TL, hack that space and create breaths in that saturation. We needed space everywhere, to open it up, to get out of confinement, so I started to create choreographies on twitter, looking for other temporalities in the TL, other relationships with the graphs, other dialogues from abstraction, thinking about the political power -even restorative- of that space that enables to breath. I struggle with the format and the spelling, obviously.
I suppose that soon people think that I’m making meaningless, entertaining cartoons , it’s inevitable when saturation is what weighs. Meanwhile, I think about how choreography is everywhere, in its power, in its capacity for intervention.
I know that in the maelstrom of the scroll these coreotweets cause strangeness, a flicker that evokes a horizon, an interior space. My own breath.
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